Gracias a las hermosas personas que celebrasteis con nosotros, el pasado viernes 20, la meditación de Navidad de ‘La Casa de Gestalt’ y la cena con picoteo que entre todos improvisamos después.

Para nosotros siempre es un encuentro entrañable que nos sitúa a la puerta de las celebraciones de Navidad con el corazón abierto. Es verdad que acoger puede ser muy sencillo y también que da lugar a muchas cosas: gracias por vuestra generosa autenticidad y vuestra acogida.

Como solemos hacer otros años, compartimos aquí los textos de la meditación y las músicas que estuvimos escuchando.

¡¡¡Y muy Feliz Navidad, queridos amigos de aquí y de allá, desde La Casa de Gestalt!!!

 

I

‘El mundo nunca carecerá de maravillas, sino únicamente de capacidad de asombro.

(G.K. Chesterton)

Nada va a ser un fracaso en la creación. La aventura de vivir no acabará mal. Dios discurre por caminos insospechados.

El nacer es un don. Y el morir también es una bendición. Todos los aconteceres son providencia. Todo es gracia. Todo es vida. La vida entera está convocada a vivirse como un maravilloso regalo.

En una sinfonía caben la diversidad de sonidos y los sonoros silencios. En la vida caben los altibajos, desde el alumbramiento a la ancianidad: niñez, adolescencia, juventud, madurez…, todo es cumbre, todo es vida.

Ninguna noche es eterna. La enfermedad no es noche. La desgracia no es noche. La ancianidad no es noche. Siempre despunta un nuevo amanecer.

(adaptado de J. F. Moratiel)

II


‘Toda vida verdadera es encuentro.’

(Martin Buber)

 

¿Están tus ojos abiertos al sufrimiento de los inocentes, a esos niños marcados por la ruptura afectiva y los abandonos humanos, al sinnúmero de personas, muchas de ellas ancianas, que conocen la insoportable soledad?

No te preocupes si tienes poco para compartir, una fe pequeña o escasez de bienes.

¡Hace falta tan poco para acoger! En torno a la mesa, el espíritu de fiesta crece en la sencillez.

He aquí que incluso con muy poco tu imaginación consigue crear belleza a tu alrededor.

(adaptado del H. Roger)

 

Esta noche es un momento especial para mirar al otro con ojos de compasión, para reconocer en cada rostro una chispa de divinidad, una historia única y sagrada.

Desde que nacimos, hemos sido bendecidos con innumerables encuentros. En la suavidad o la aspereza, el disfrute o el conflicto, la alegría o el dolor, cada uno de ellos es como una estrella en la oscuridad.

(La Casa de Gestalt)

III

Cuando la noche se hace densa, el amor de todo amor es un fuego. Fija tu mirada en esa lamparilla encendida en la oscuridad hasta que la aurora rompa y comience a despuntar el día en tu corazón.

Incluso cuando el sentido de la vida parece desdibujarse, un ascua sigue brillando. Ella ilumina tu noche. Su amor es un fuego.

Brota para ti una fuente de alegría. No la euforia ni una alegría cualquiera, sino ese júbilo que viene del corazón de las fuentes de eternidad.

…Y se abren las puertas de un espíritu de infancia, de asombro de un amor.

¡Cante en ti la alegría, el maravilloso don de la creación! Tus ojos disciernen en él destellos de eternidad.

(adaptado del H. Roger)

Músicas